viernes, 24 de abril de 2009
Adiós mundo cruel!
Me satura lo hueco,
la eterna soledad
que habita en su cabeza.
Me aterra la muerte de las ideas,
que los escritores no seamos leídos,
detesto que una simple caja de colores,
se lleve la esencia pura
de nuestra humanidad.
Es exagerada la forma
en que un montón de huesos
y plásticos,
provocan
orgasmos,
separaciones,
obsesiones,
angustias,
y generan
mucho dinero,
mientras el resto del mundo
se muere de hambre.
Adiós a esta humanidad marchita,
materialista,
capitalista,
y egoísta por sobre todas las cosas.
Adiós mundo cruel!
lunes, 13 de abril de 2009
Día Gris
Lo más doloroso
es encarar las horas sin temor,
ensayar un olvido
para sentirse menos vacío,
lo más doloroso sin lugar a dudas
es despertarse abrazada con los demonios.
Con un día así de lluvioso,
los errores se ponían de acuerdo
para recordarme lo culpable que soy,
y lo deprimente que es estar viva.
Afuera todo era gris,
desde la ventana podía ver
como la melancolía
bailaba lujuriosa bajo la lluvia,
y una nostalgia recién nacida
de las muchas que tenía,
se aferraba a mi pierna
como una niña tímida,
observando con asombro los danzares
de su prima más cercana.
No cobrarán multa las aburridas felicidades
que alguna vez he tenido,
más impagable será el crédito de ilusiones
que prometí remunerar alguna vez,
frente a las puertas del infierno,
ahora de qué me sirve la vida?
o extorsiono lo poco que me quedó de alma
para que solucione los problemas,
o me deshago,
de todo lo que me rodea.
jueves, 9 de abril de 2009
Diario ruso
Escribo sobre paredes de hielo
los nombres de los necios
que jugaban a estar muertos,
escribo sobre vidrios
pero desde afuera
el mensaje no se entiende.
Mi oscuridad solitaria…
encuentro luces en el fondo del mar,
primer día en el mundo de los ciegos,
comienzo a observarlo todo
menos el alma de los locos.
Mientras tú sigues ahí,
en el mismo lugar,
sobornando a tus fantasmas
para que te dejen en paz…
puedo ver la luz de los locos.
Con el paso del tiempo
serás todo lo que necesite,
sentiré tu respiración a mi lado
y hablaré por tus ojos
aunque el sol se vuelva luna
y tú sigas durmiendo.
La inocencia recordó
de qué estaban hechas sus culpas
y se largo a llorar como una niña histérica,
en el otro extremo del paisaje
mi figura desfigurada sufría de sordera
y se escondía tras las hojas de un diario ruso.